QUÉ SON LOS CABALLOS:
Los caballos (y las yeguas, sus hembras) actuales son descendientes evolutivos de una especie de mamíferos herbívoro pequeño que existió en el eoceno, hace alrededor de 55 millones de años conocido como eohippus.
El primer ancestro propiamente dicho de los caballos fue el hiracotherium, el primero en aumentar su altura hasta los 115 cm y perder los dedos de cada pata, hasta quedar uno solo, endurecido, hasta devenir los cascos actuales que presentan los caballos de cada pata.
En algún momento del pleistoceno, hace alrededor de 15.000 años, los caballos se esparcieron desde Norteamérica al resto de Eurasia y África, y posteriormente se extinguieron en Norteamérica. Es por ello que su larga historia junto al ser humano inicia alrededor del año 3600 a. C., en la región de Kazajistán, cuando fueron por primera vez domesticados y empleados como animales de carga y de transporte.
Desde entonces, el caballo formo parte integral de la vida humana. Se lo ha empleado con fines agrícolas, bélicos y deportivos, gracias al ser humano volvió a habitar todas las geografías del planeta. Por ejemplo, el caballo regreso a América de mano de los conquistadores españoles en el siglo 15, luego de que se extinguiera en la región mas de 10.000 años atrás.
En la cultura, los caballos se han interpretado como símbolo de pureza, fuerza y gracia, y se los pueden encontrar en representaciones políticas, mitológicas y artísticas de toda clase, desde escudos nacionales hasta relatos religiosos.
Son particularmente famosos los centauros de la tradición grecorromana, seres mitad hombre mitad caballo, y el famoso caballo volador, pegaso. Otro caso célebre es el de los unicornios, seres mitológicos europeos que eran caballos dotados de cuernos en la frente.
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